La jornada de lunes 22 amaneció con sorpresa en las aguas del río Paraná, en la costa de San Nicolás, más precisamente en bajada Boto, pegado a la química ex Atanor que ahora se llama Albaugh Argentina, con la presencia de algas tóxicas.

Allí, los vecinos de barrio Química mostraron su preocupación por el color del río, un tanto inusual, en donde se puede observar una rareza importante del agua. Según indicó la doctora Viviana Giuliani, se trataría de cianobacterias que se forman en remansos donde el agua se detiene y fermentan por la falta de oxígeno.

Todo esto se suma a que el agua del río, según manifestó la Universidad Nacional de La Plata hace un tiempo, no se encuentra en las mejores condiciones. La población ya se está poniendo en alerta y desde la municipalidad deberán tomar cartas en el asunto.