Pese a que el Concejo Deliberante sancionó una ordenanza que prohíbe el uso, venta o manipulación de pirotecnia, haciéndose eco del pedido de madres de niños autistas y organizaciones protectoras de animales, la normativa no se cumplió en las pasadas fiestas de fin de año.
El día 24 de diciembre último, la ordenanza se respetó, no en su totalidad, aunque sí en gran parte del partido.
Pero el 31 de diciembre, la utilización de la pirotecnia fue de manera alevosa, y se produjo en forma casi exagerada.
Las ONG de ambos grupos expresaron su repudio, su descargo y su enojo a través de las redes sociales.
Se quejaron por la situación y por la falta de conciencia y respeto de los vecinos que violaron la ordenanza, y además, perjudicaron el bienestar de muchas personas y animales.