El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, participó del acto por el Día de la Soberanía en San Pedro, donde hizo un fuerte llamado a la defensa de la soberanía nacional y expresó sus críticas al gobierno de Javier Milei. Durante su discurso, Kicillof remarcó la importancia histórica de la soberanía, destacando la relevancia de la batalla de la Vuelta de Obligado, y conectó este hecho con los desafíos contemporáneos que enfrenta el país.
Estuvieron presentes el intendente de San Pedro, Salazar Cecilio quien fue el anfitrión, la Vicegobernadora Verónica Magario, el intendente de Almirante Brown, Mariano Casacallares, de Berisso, Fabián Cagliardi, de Salto, Ricardo Alessandro, de Ramallo, Mauro Poletti entre otros intedentes de la Provincia.
"Me llena de alegría ver que la soberanía, con todo su significado, moviliza a nuestro pueblo de esta manera. Estamos en San Pedro plantando las banderas bonaerense y argentina bien alta", afirmó Kicillof, resaltando que, a pesar de los intentos de los "vendepatrias que nos gobiernan", la lucha por la soberanía sigue viva en el pueblo argentino.
El gobernador recordó la trascendencia de la batalla librada en el lugar, afirmando que “un puñado de argentinos dio una de las batallas más valiosas de nuestra historia” contra las potencias extranjeras que buscaban saquear el país bajo la excusa de la "libre navegación de los ríos". “¿De qué libertad hablan? Si lo que querían era hacernos esclavos”, aseguró Kicillof, subrayando el carácter imperialista de esas políticas.
En el contexto actual, Kicillof señaló que la discusión sobre el futuro de la Argentina sigue siendo la misma: “¿Vamos a ser un país productor de materias primas para otros, o vamos a defender nuestro trabajo y nuestra industria?”. Criticó las políticas económicas del gobierno de Milei, acusándolo de querer entregar el país a las potencias extranjeras, mientras que en su lugar, la provincia de Buenos Aires defiende la producción nacional.
El gobernador también expresó su desacuerdo con la decisión del gobierno nacional de rechazar el ingreso de Argentina a los BRICS, un bloque que representa más de un cuarto de la economía mundial. "Es un daño tremendo para nuestro país", dijo Kicillof, quien prometió revertir esa postura en cuanto sea posible. Asimismo, advirtió sobre la peligrosidad de la política exterior del actual gobierno, particularmente en lo que respecta a la relación con la OTAN y la alteración de la histórica neutralidad argentina.
Kicillof también se refirió a la situación de las Malvinas, criticando la falta de acción del gobierno nacional frente a las provocaciones del Reino Unido. “Las Malvinas fueron, son y serán argentinas”, afirmó rotundamente, señalando que la defensa de la soberanía en las islas es una cuestión que debe ser afirmada "todos los días desde la acción de gobierno".
En otro pasaje de su discurso, Kicillof abordó el tema de la licitación para la vía navegable troncal, un proyecto que considera una amenaza a la soberanía de las provincias. “Milei no puede privatizar nuestro río ni darle la espalda a las provincias", expresó, reiterando su compromiso con la autonomía provincial y la defensa de los recursos naturales.
Por último, Kicillof anunció la creación de una comisión asesora para avanzar con la construcción del Canal Magdalena, un proyecto clave para recuperar soberanía, aumentar la competitividad y promover la producción y el trabajo. En este sentido, hizo un llamado a la Legislatura provincial para declarar de interés provincial la construcción del canal, y advirtió que, si el gobierno nacional no actúa, la provincia de Buenos Aires lo hará por su cuenta.
El acto en San Pedro sirvió como un recordatorio de las tensiones políticas y económicas que atraviesa el país, con un gobernador que continúa marcando una clara distancia de las políticas del gobierno nacional, mientras apuesta por la defensa de la soberanía y la independencia económica.
