Bronca

La aprobación del COUT suma rechazos

Férrea postura ambientalista.
Férrea postura ambientalista.

Continúan las repercusiones por la aprobación exprés del Código de Ordenamiento Urbano y Territorial por parte del Concejo Deliberante. En esta oportunidad, la Asamblea Vecinal Ramallo se expresó duramente contra el cuerpo legislativo, lamentando que haya “concejales de espaldas al pueblo”.

“El 7 de diciembre, nuevamente a escondidas del pueblo, el Concejo Deliberante de Ramallo aprobó por unanimidad el Código de Ordenamiento Urbano y Territorial para el Partido. Este código manipulado y desprolijo llegó después de años de desafíos y rechazos por parte de la provincia. En 2019, el gobierno provincial solicitó, entre otras cosas, la participación ciudadana, se creó la Comisión para el Ordenamiento Territorial (COPOT), pero tras la pandemia se decidió suspender la participación hasta que el Concejo Deliberante autorizara la prórroga correspondiente”, expresaron desde la organización.

Y agregaron que “el Concejo nunca aprobó la prórroga, lo que resultó en la finalización abrupta de la participación ciudadana. La tristeza y la impotencia se apoderaron de aquellos que ansiaban un proceso transparente y democrático. El presidente del Concejo Deliberante, Sergio Costoya, junto con los concejales y el municipio, deshabilitaron la participación ciudadana”.

Oscar Molleví, referente de la Asamblea Vecinal, expresó en medios locales su mirada sobre la situación del COUT, y denunció “la falta de participación ciudadana” y acusó a los “concejales de actuar a espaldas del pueblo”. “El proceso, marcado por la suspensión de la participación ciudadana y la aprobación unilateral del código, dejó a la organización de vecinos con un sentimiento de abandono y desencanto”, sostuvo.

Molleví criticó “la falta de transparencia y participación ciudadana en el proceso”, señaló que “el código, manipulado y desprolijo, llegó después de años de desafíos y rechazos por parte de la provincia. En tan solo un minuto y medio, el futuro de Ramallo fue decidido unánimemente, dejando a sus habitantes con el peso de la decepción ante un proceso que se apartó de principios fundamentales como la justicia y la participación ciudadana”.

Comentarios