“Con el fin de seguir contribuyendo positivamente con el medio ambiente e interesados en cambiar su punto de vuelco para mejorar las condiciones en las zonas de la costa de la ciudad de Ramallo”, Fiplasto realizó una investigación y un minucioso trabajo de campo en conjunto con la Universidad Nacional del Litoral de Santa Fe.
Especialistas de dicha Universidad y de la compañía intervinieron en el relevamiento de más de 7 kilómetros en la costa y cauce del río Paraná, logrando identificar la morfología del río y las condiciones del flujo del agua.
Siempre de acuerdo a lo informado por la firma, “al extraer diferentes muestras de las zonas afectadas y de las zonas libres del impacto ambiental a causa del vuelco de efluentes, se pudo analizar y determinar cuál era el mejor punto para realizar el vuelco”.
El impacto del punto de vuelco anterior se veía reflejado en la denominada “mancha negra” instalada en la costa del río Paraná, “pero se trataba solamente de un impacto visual, dado que el hardboard que la empresa produce es totalmente ecológico, siendo el único tablero de madera que se fabrica en el país sin agregados químicos”, expuso Fiplasto.
Luego de este arduo trabajo de campo, se arribó a un modelo calibrado, probado y aplicado de vuelco, que “permitió eliminar la mancha negra del río Paraná en cuestión de semanas”.
En el marco de esta resolución, representantes de UPVA visitaron la planta para ver los resultados.
“Todos apuntamos al mismo objetivo, la salud y el medioambiente. No vamos a tener más mancha negra, que la gente se quede tranquila. Es un gran paso para Ramallo que Fiplasto haya logrado esto”, afirmó el presidente de la ONG Leandro Monserrat.
Finalmente, Fiplasto puso de relieve que “lleva detrás de este proyecto más de 10 años de trabajo e investigación y una inversión durante todo el período que supera los 4,5 millones de dólares para lograr el resultado esperado: erradicar la mancha negra de las costas del Paraná y demostrar su compromiso con el entorno y la sociedad”.