Jorge Farías, quien reemplazó hasta el 6 de marzo a Marta Gómez, exigió el derecho a la banca de concejal, argumentando que su reemplazo lo convierte en titular. La clave es un error administrativo, que abre un panorama incierto dentro del recinto. A menos de una semana de las aperturas de sesiones ordinarias, el cuerpo parlamentario local se ve envuelto en otro escándalo.
Farías hace hincapié en una interpretación del Artículo 88, de la Ley Orgánica de las Municipalidades, donde en su último párrafo argumenta que: “si durante la sustitución temporaria se produjera una vacante definitiva, el suplente llamado para ese interinato la ocupará en carácter de titular”.
En diciembre debía producirse la definición del reemplazo de Marta Gómez, quien renuncio a la banca, y el que la ocupara debería quedar como concejal titular, esto recayó en Farías. Pero dentro del bloque del FpV ya se había producido otra vacante, la de Gabriel Macías, quien ocupará el cargo de Delegado de Villa Ramallo. En esa oportunidad, anterior a la renuncia de Gómez, fue reemplazado por María Luisa Herrera. El conflicto ocurrió cuando, al regresar Macías, fue Jorge Farías quien abandono el Concejo.
Consultado por este tema, el presidente del Concejo Deliberante, Sergio Costoya, contó que “cuando comenzó diciembre, que es cuando entra Farías, la secretaria del Concejo de entonces, debería haber cambiado el orden, que Farías reemplazaba a Macías; y Herrera a Gómez, que queda definitivo. Por eso se genera el error, que luego fue corregido, pero debe expedirse el Tribunal de Cuentas”.